FAIL

Cada vez que voy a Fantasilandia me pasa algo malo.

La primera vez que fui, me puse cerca del Tsunami porque hacia calor. Nadie tuvo la buena voluntad de avisarme que el agua estaba ESTANCADA, por lo que cuando la pseudo canoa bajó por la pseudo cascada, creando un pseudo tsunami, quedé empapada de pies a cabeza al más puro estilo de Edgar se Cae

La segunda, no leí el letrerito del Kamikaze, que claramente señalaba:

DEPOSITE AQUI

su goma de mascar (chicle).

Peligro de atragantamiento

Pero claro, con la emoción de subirme al juego, con las alucinaciones provocadas por el calor y la fermentacion de la gente cercana en la fila, además de la distracción provocada por los chillidos desquiciados de la gente metida adentro...no leí. Cuando el juego comenzó a girar todo iba perfectamente, sin embargo mientras aumentaba la velocidad se elevaba cada vez más, hasta dejar a todo el mundo de cabeza, y yo sentía como el chicle intentaba meterse por mi nariz desde la boca hasta mi cerebro, en un maléfico intento de controlarme mentalmente.

Aunque puedo decir, orgullosamente, que sobreviví a la traumática experiencia, y por suerte nadie se dio cuenta (Cosa poco relevante ahora que lo publico en el Blog).

Y una de las últimas, en las que decidí subirme al Tagadá. Se me estaban bajando las medias debido al masoquismo que implica el acto de subirte a una máquina que te va a dejar como milkshake de ñoña, y estúpidamente solté una mano para subirlas pocos segundos antes del sádico salto que dio el juego. Juro por Dios que vi a Jesús haciéndome morisquetas en la entrada al cielo.

Básicamente esa es mi experiencia (además de otras tantas, como quedarme atrapada en el tubo negro, que un tipo me confundió con un niño y me dijo: 'Permiso, compadre', o que me tragué el agua del Top Spin en un dramático atragantamiento mientras te ponen de cabeza, entre otras.)

PD: Ninguno de los otros Blog que he creado han sido utilizados, porque...bueno, se me olvidó el nombre.

Al infinito y más allá *-*